El talento senior es esencial para fortalecer los servicios y procesos, gracias a la amplia experiencia y los conocimientos claves que han adquirido a lo largo de su carrera.

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La brecha laboral en el mundo es cada vez más grande. Hoy en día la competencia entre el talento senior y talento junior para poder ser parte en una buena organización se ha vuelto aún más feroz.

Los recientes cambios que ha sufrido el modelo tradicional de trabajo a raíz de los avances tecnológicos, solo han incrementado más esta brecha invisible. Muchas personas de más de 50 años son vistas ante las compañías como individuos menos calificados debido a que no nacieron en un mundo digital, por lo que son relegados a actividades o puestos donde estas herramientas no son fundamentales, ya que no se les cree competentes para manejarlas.

De igual forma, las nuevas profesiones o posiciones que involucran un conocimiento tecnológico suelen ser ocupadas mayormente por personas más jóvenes y no por talento senior, lo que ha ocasionado una desproporción en el porcentaje de ocupación de estas poblaciones.

Sin embargo, esta percepción no siempre es certera y muchas veces es sesgada, el talento senior no solo puede ponerse a la par de las nuevas generaciones gracias a una formación y estudio constante en nuevas metodología, procesos y herramientas, sino que tienen detrás de sí una larga lista de cualidades y habilidades que pueden llegar a mejorar el rendimiento y productividad de las empresas.

A continuación, te mostraremos 4 beneficios de contratar talento senior:

1. Estabilidad:

Al haber experimentado en diferentes ámbitos, trabajos y posiciones, poseen una idea clara de lo que desean, por lo que suelen centrarse en proyectos a largo plazo, que les proporcionen una seguridad económica y social.

2. Red de Contactos:

Debido a su largo recorrido tienen una larga lista de contactos, los cuales pueden variar entre proveedores, colegas, colaboradores, etc.

Estas relaciones se han formado a través de los años y suelen estar entrelazadas con el rublo de su trabajo o formación, por lo que a través de estos colaboradores, las empresas tendrán la oportunidad de ampliar aún más su red en el mercado laboral.

3. Autónomos:

No suelen precisar de supervisión, pues conocen los procesos que se deben llevar a cabo, y de no hacerlo, poseen la habilidad de resolución de problemas, adquirida durante su experiencia previa en otros empleos.

4. Gestores de Equipo:

Su trayectoria les ha permitido estar en diferentes fases de su vida laboral, donde muy seguramente han tenido que trabajar en equipo, llegando incluso a liderar algunos de ellos.

Esto es fundamental para aquellas empresas que quieran crear un ambiente diverso en su compañía, pues es el talento senior, el que generalmente capacita o da la bienvenida a los recién llegados, ayudando a retroalimentar el ciclo de la vida laboral.

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